Fotomerienda: 07/2011

Muffins de avena con jengibre y naranja


No soy muy fan del jengibre, pero he de reconocer que como condimento en repostería tiene su punto. En galletas queda estupendo así que decidí probarlo en magdalenas. Tengo que buscarlo seco y molido en alguna de las muchas tiendas de especias de Granada, pero si no, siempre está la opción de visitar fruterías con variedad y comprar un tubérculo fresco, que si se guarda en un recipiente hermético, aguanta bastante en el frigorífico.

Ingredientes para media docena de muffins grandes:

  • 120 g de harina de repostería tamizada (1 taza)
  • 60 g de harina integral (1/2 taza)
  • 40 g de copos de avena (1/2 taza)
  • 1 cucharada de ralladura de naranja
  • 1 cucharada de levadura química (8 g, 1/2 sobre)
  • 1 cucharadita de jengibre fresco rallado
  • una pizca de sal fina
  • 1/2 cucharadita de canela molida
  • 1 cucharada de azúcar blanco para decorar
  • 2 huevos
  • 120 g de azúcar moreno (1/2 taza)
  • 125 ml de leche (1/2 taza)
  • 90 g aceite de oliva (1/2 taza)


  • Ingredientes para las naranjas confitadas para decorar:

  • una naranja pequeña (unos 100 g)
  • 100 g de azúcar
  • 50 g de agua


  • Elaboración de las naranjas confitadas:

    Como requiere una hora de cocción, puedes preparar primero las naranjas, aunque los muffins pueden tomarse solos.

    Limpiar bien la cascara de la naranja y cortar en rodajas o en gajos (esta vez lo he hecho en rodajas, pero para la próxima limpiaré los gajos enteros, sin piel).

    En un cazo, poner el azúcar y el agua junto con la rodajas de naranja y cocer a fuego lento, moviendo el cazo de vez en cuando, durante una hora aproximadamente hasta que la naranja estén confitadas y sólo quede un almíbar denso. Sacarlas y dejar escurrir sobre una rejilla.

    Si no se utilizan todas, pueden congelarse envueltas en papel film o guardarlas en conserva con el almíbar que se ha formado.

    Elaboración de los muffins:





    En un bol, mezclar los ingredientes secos (excepto el azúcar): la harina de repostería, la harina integral, los copos de avena, la ralladura de naranja, la levadura en polvo, el jengibre rallado, la sal y la canela, hasta que queden bien ligados.

    En otro bol batimos los huevos con el azúcar hasta que la mezcla blanquee y haya aumentado de volumen. Agregar la leche y el aceite y batirlo todo.



    En el recipiente donde tenemos los ingredientes secos verter la masa líquida e integrarla suavemente removiendo con una cuchara o paleta, sin batir demasiado, solo lo justo para que queden integradas ambas mezclas. (Si la masa está muy pastosa, agregar más leche.)

    Mientras se calienta el horno a 190-200 ºC, dejar reposar la masa y preparar las cápsulas de papel rizado. (Si tienes bandeja para muffins o flaneras metálicas úsalas como molde exterior para evitar que las cápsulas se abran.) Repartir la masa en los moldes llenando unas 3/4 partes de su capacidad (si te ves aventurero y usas moldes metálicos, puedes llenar un poco más). Justo antes de meter los muffins en el horno, espolvorear con azúcar blanco.

    Hornear a 190º durante 25 minutos aproximadamente hasta que empiecen a dorarse por encima. Para comprobar que están hechas por dentro, pinchar una magdalena con un palillo y verificar que sale limpio. Tras sacarlas del horno, dejarlas enfriar sobre una rejilla y decorar con las naranjas confitadas.

    Brioches trenzados


    Ingredientes para 4 brioches de unos 80 g cada uno:

  • 200 g de harina de fuerza
  • 30 g de azúcar
  • 2,5 g de levadura instantánea
  • 1/4 de cucharadita de sal
  • 20 g de mantequilla a Tª ambiente
  • 1 huevo batido
  • 50 ml de leche
  • 25 ml de agua


  • almendra en grano o fileteada
  • 30 g de azúcar glas
  • 1 cucharada de agua templada


  • Elaboración:

    En un bol, mezclar la mitad de la harina con el azúcar, la levadura la sal.




    Agregar la mantequilla, el huevo batido (guardando un poco para el acabado de los brioches), la leche y el agua y remover con una cuchara para que quede todo ligado.

    Incorporar el resto de la harina poco a poco, pasando la masa a la encimera ligeramente enharinada cuando sea manejable y amasando hasta que quede elástica y homogénea.



    Formar una bola, volver a poner dentro del bol, tapar con un paño de algodón y dejar reposar 15 minutos. (Mientras, se puede aprovechar para recoger los cacharros y que hayamos puesto por medio. ;))

    Quitar el aire a la masa apretándola un poco, formar una bola, tapar y dejar levar durante 2 horas (ahora en verano que hace más temperatura, puede ser que una hora y media esté listo este paso).

    Desgasificar de nuevo, formar una bola, tapar y dejar levar durante 1 hora.

    Dividir la masa en 4 partes iguales, y estas a su vez, en 3 partes cada una. Con cada tres porciones de masa, formar 3 rollos alargados y trenzar. Poner las trenzas en una bandeja forrada con papel sulfurizado, tapar con el paño y dejar levar 30 minutos. Mientras tanto, precalentar el horno a 180 ºC.

    Pintar los brioches con el huevo reservado y espolvorear con la almendra a lo largo del centro de la trenza.

    Hornear a 180 grados durante 20 minutos. Dejar enfriar encima de una rejilla.

    Cuando estén fríos, mezclar el azúcar glas y el agua para formar un glaseado y pintar las trenzas.


    *Estos brioches están hechos con toneladas de amor y van dedicados a Carlos, porque recientemente ha ganado un gran premio de fotografía, pero también porque cada día a su lado es especial.



    ** Basado en una receta de brioches de L'Exquisit.

    *** He repetido la receta aromatizando la masa con ralladura de naranja y canela molida y han quedado espectaculares.

    Risotto de bacalao


    El otro día Sonia, de L'Exquisit, me puso los dientes largos con un estupendo risotto (he de decir que todas sus recetas son magníficas, os recomiendo su blog), y no me he resistido a prepararlo, con minúsculas variaciones.

    Ingredientes para 4 personas:

  • aceite de oliva
  • 1 cebolla grande (o muchas pequeñitas, como es mi caso)
  • 1 diente de ajo
  • 1/2 pimiento verde
  • 400 g de bacalao fresco
  • 250 g de arroz
  • un chorreón de vino blanco
  • 1/2 l de caldo de pescado (o de verduras)
  • 20 g de mantequilla
  • sal
  • pimienta blanca
  • 4 cucharadas de queso parmesano




  • Elaboración:
    Cubrir el fondo de una cacerola con aceite de oliva y pochar la cebolla bien picada junto con el ajo en cuadraditos muy pequeños. Cuando la cebolla esté blandita, cortar el pimiento y rehogarlo junto con ella. Sazonar las verduras (no demasiado, mejor corregir de sal al final). Añadir el bacalao cortado en trozos grandes (que como le demos mucho meneo, se deshace) y rehogar durante varios minutos. Agregar el arroz y mezclar con el resto de los ingredientes durante un minuto. Echar un chorreón de vino blanco y dejarlo reducir.

    Aparte, se tendrá el caldo caliente. (Tenía en el congelador un tupper con fumet de merluza y gambas que le ha venido perfecto a la receta.) Ir añadiendo poco a poco el caldo al arroz, a medida que lo vaya necesitando, hasta que el risotto esté en su punto, nunca incluyendo otro cazo de caldo hasta que el arroz no haya asimilado el anterior. En esta receta es recomendable remover lo justo, para que no se deshaga demasiado el bacalao.

    Cuando el arroz esté listo, salpimentar al gusto. Apagar el fuego y apartar la cacerola, poner la mantequilla y remover.

    Se le puede poner un poco de queso parmesano por encima, o servirlo acompañado de una teja crujiente. Para hacer las tejas, poner un poco de queso parmesano entre dos hojas de papel sulfurizado y cocinar en el microondas durante poco más de medio minuto a la máxima potencia.

    Puré de verduras


    Me gustan las recetas que se hacen "a sentimiento". Como las cantidades no vienen impuestas siempre hay lugar a la improvisación. Algunas veces puede salir sólo comestible pero otras puede salir perfecto. Es en esas ocasiones cuando te alegras de haber hecho una olla entera de puré.

    Ingredientes:

  • calabacines (2/5 partes)
  • patatas (1/5 parte)
  • espinacas en hoja (2/5 partes)
  • agua
  • sal
  • quesitos
  • aceite de oliva


  • Elaboración:
    Trocear el calabacín y la patata y ponerlos junto con las espinacas en una olla. Añadir agua, pero sin llegar a cubrir las verduras. Sazonar y cocer a fuego medio hasta que la patata deje de estar dura.

    Apartar del fuego. Retirar el exceso de agua con un cucharón (mejor dejar un poco seco y añadir parte del caldo retirado si fuese necesario a que el puré quede demasiado líquido). Echar los quesitos para que se fundan, un buen chorreón de aceite de oliva y batir hasta conseguir un puré fino.

    Se le pueden poner picatostes o piñones para acompañar.

    Pan para el bocata de la merienda-cena



    Siguiendo la receta del pan francés del libro "El aprendiz de panadero", de Peter Reinhart.